jueves, 5 de junio de 2008

Déjame acompañarte...


Inauguro el blog con un buen disco que descubrí hace relativamente poco:



Ghost, del grupo "en solitario" de un talentoso (y, quizás, en un futuro, muy conocido) Ben Cooper (Electric President) está basado según dice en una vieja casa en la que vivía.

El disco vuelve a hacer soñar a todo aquel que esté dispuesto a dejarse dominar por las dulces melodías y la ensoñadora nostalgia con la que esta cargado. Es de esos discos que enamoran a la primera, apto para todos los gustos y, sobretodo, para quien busque sinónimo de calidad si, como yo, no tiene manía por ningún tipo en concreto de sonido...



Déjame acompañarte en todos tus viajes. Pensarás que ya lo he hecho siempre, pero esta vez será diferente, esta vez abriremos nuestra alma y mente. Déjame que me conozcas…

Ursiban era extraño pero familiar, de complexión muy delgada pero sin dejar ver los huesos. No tenía absolutamente ni un solo pelo en el cuerpo, mostrando una piel tan blanca como la leche, o más, si eso era posible.
Su rostro inspiraba bondad, calma, serenidad, alguien de mucha confianza y de amistad profunda, aunque no te lo hubieses topado nunca. Siempre estaba serio y pensativo mirando todo lo que le atraía curiosidad, que solía serlo todo.
Por lo poco que lo conocía, aunque él insistía que nunca se había separado de mí, era un alma insaciable de conocimiento y tenia una búsqueda personal, no muy clara.

Esta vez me sonreía, aunque digo eso por decir, ya que para mí era prácticamente la primera vez que estaba con él, pero como él insistía de conocerme de sobra, y aún encima me daba sensación de ser así, lo dejaba pasar. Me gustaba su compañía, hacia más amena mi estancia en aquel tren, para nada desagradable y con uno de los mejores paisajes que había visto nunca.

Conforme miraba a Ursiban, cada vez me picaba más la curiosidad por saber que pensaba, cual era el funcionamiento de su cabeza y, por supuesto, como conseguía con solo su presencia calmar hasta las más fieras bestias e inspirar hasta a los artistas más acabados.

Dejé de preguntármelo por que algo me decía que no iba a lograr nada dándole vueltas al asunto, así que me relajé (aún más) y pegué otra cabezada disfrutando de aquella situación.

Quien sabe cuantas veces en la vida iba a estar uno así de bien…



1 comentario:

ChelyJR dijo...

Probando, probando...